Editor: Mario Rabey

5 de julio de 2011

Virgencita de Urkupiña

por Marcela Herrera Igaki

para cumplir con nuestra Pachamama que delicadamente se ha vestido con trajes que la ocasión histórica le ofreció para no dejar de existir

Virgencita de Urcupiña
Niña territorio de ofrendas
Me das la vida y me la quitas.
Y Cuando tú quieres,
Yo bailo en tu pena profunda
Tus repiques de cuero y de tierra
Me anidan.

Me hallo en tu vientre anhelante
Todo el año gestando
Un pueblo, el trabajo, la fiesta
La muerte,
Será que solo el movimiento
de los pasos por la calle
liberan el grito sin tierra,
recuperan el suelo
para estar
otro Agosto
amamantando la esperanza.

Lo que prestas lo reclamas
Y yo bailo, es suficiente
Los colores tus reflejos
Mis sonrisas tus latidos,
Por un momento estás viva
Y de tu altar has bajado
A tenerme y a llevarme
Como en aguayo dormida.

Será que el movimiento nos amasa
Madrecita
Ya no soy "uno"
Y el abrazo me desarma
Tu mano une las manos, los ojos en la calle,
Somos entonces una sola tela
Envueltos fraternos
Ya no somos "uno",
Pasa, pasa,
Zapateadito,
Somos terrones al viento,
Una polvareda
De memoria
cubre mis brillos,
mi traje
y ya no es "mío".

1 comentario:

EL MUNDO DE GRACIELA T. dijo...

Admirable la actitud intelectual de los pueblos americanos. Ante la opresión generaron y la siguen cultivando, una ideología capaz de vencer a quienes quisieron vencerlos.
Mi mayor respeto. Graciela