Este 24 de marzo

por Daniel Chango Illanes (*)

Este 24 de marzo renovamos un compromiso y una voluntad poltica frente a la historia argentina

1) Con relación a la Memoria:
Seguir firmes en la tarea de no permitir que volvamos atrás. Para ello hay que reducir a la impotencia al enemigo. No dejarlo recuperarse. Mandarlo a la cárcel que es donde debe estar. Y esto no debe ser slo con los responsables militares del genocidio, sino tambin con los responsables civiles: los Martnez de Hoz y compañía. Son una minoría poderosa, andan por ahí, presionan por ahí. Algunos y algunas son dueños de medios de comunicacin. Otros ha sido responsables de la deuda externa ilegítima, que debe investigarse no para demorar sino para inmovilizar poltícamente a un sector muy importante de la derecha.

2) Con relación a lo que viene:
Creo que es bueno señalar que estamos ante el nacimiento de un nuevo bloque histórico en la Argentina.
Está surgiendo una nueva hegemonáa colectiva desde el campo popular, ahí tenemos que estar, a eso tenemos que contribuir.
Es lógica y explicable la desesperación del bloque histórico conservador, es decir del que está en el pasado, que quiere mantener ese pasado a toda costa. Tengamos en claro que una parte de ese bloque conservador trata, también, de capturar para sí una porción de izquierda funcional a sus intereses, y una parte regresiva del peronismo de derecha, formado en el menemismo y el duhaldismo.

3) Para poder consolidar ese nuevo bloque histórico hay que formar un verdadero frente social y político (más all de cualquier especulación electoral) contra la derecha. En ese frente habrán de agruparse -en los hechos mucho más que en las palabras- las fuerzas que provienen del
populismo plebeyo, del centroizquierda, del progresismo, de sectores muy valiosos del movimiento nacional, de la izquierda y el peronismo nítidamente antiimperialistas y solidarios con la transformación que se vive a escala continental, de todos aquéllos que vienen desde las resistencias al gorilismo, al genocidio, al neoliberalismo, al republicanismo liberal cuyo comité central es la embajada yanqui, al neogolpismo de matriz hondureña, al neogolpismo de matriz mediática, y a los que se disfrazan de defensores de las instituciones para inmovilizarlas y hacerles perder contenido popular. En la medida en que entendamos ese viejo y siempre renovado antagonismo contra la reacción y contra la regresión, haremos más rápido el camino y más contudente el triunfo popular.

(*) Daniel Chango Illanes es el principal dirigente de la izquierda sanjuanina